Basta con salir de casa tomando un aperitivo de wasabi comprado en el Aldi.
Pasas por el centro cultural hispano-japonés y no te hace falta meterte a las clases de japonés, la semana pasada era la semana cultural del Japón. Durante esos días daban charlas sobre el idioma japonés, enseñaban a escribir tu nombre y te ilustraban sobre la cultura japonesa.
Yo en concreto pude ver una charla sobre los jardines japoneses. Muy elegantes, muy bonitos y muy inspiradores ellos. En el patio del centro pudimos ver un pequeño ejemplo de dichos parajes y a su vez ver los típicos peces Koi.
¿Y para rematar? Pues te vas cenar en condiciones al restaurante japonés Ai donde puedes degustar de la cocina tradicional de la lejana isla oriental. Platos muy ricos, aquello que comen a diario allí, cocinado por manos expertas y servido con mucha simpatía.
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