Ahora le toca el turno a mi banco, algo ya casi sagrado en esta sociedad, el dinero de cada uno. El otro día pude ver para mi asombro que se había realizado un pago con mi tarjeta de 70€, ni más ni menos, para pagar el seguro de tarjetas CPP. Sería todo normal si no fuese por que jamás he contratado dicho seguro y por que en su web además anuncian un precio de 35€. Pensé que me habían robado la tarjeta o los datos de esta ya que no había encargado dicho seguro, pero no, va por otros derroteros el tema.
Por supuesto en el mismo momento en el que me percaté del "robo" me puse a buscar información por Internet y descubrí lo siguiente. Banco Santander junto a esta aseguradora (también lo hace el BBVA) cargan este seguro a la cuenta de sus clientes sin permiso ninguno y con una comisión de 35€. No se hasta que punto es esto legal, puesto que en nuestros contratos hay muchas y ambiguas clausulas.
Ipso facto llamo a CPP para reclamar y pedir explicaciones. Lo único que recibo es información sobre ese seguro y tras insistir varias veces en que no me interesa me comunican que procederán a la devolución y cancelación del mismo. Por si acaso ya que no me fío y también están involucrados, llamo al Servicio de atención al cliente de Santander. Aquí simplemente me comunican que con la llamada anterior están todas las gestiones hechas, pero nadie me da una explicación de cómo o por qué se me ha cobrado esto, lo cual me hace dudar de la legalidad de esta práctica.
Ocho días después recibo la devolución de mi dinero, esperemos que no vuelva a repetirse por que si no ando atento me roban, estando en casa tan tranquilo, estos son los carteristas del siglo XXI.
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